Hoy en día, las viviendas procedentes de entidades bancarias son las que están teniendo un gran volumen de salida debido a diversos factores; las entidades bancarias ofrecen productos hipotecarios muy buenos si te quedas un inmueble de su cartera comparado con los que la compra es a un tercero y el banco solo realiza la hipoteca, además debido a la caida de los precios de la vivienda, dichas entidades al tener cierto volumen de inmuebles y algunos adjudicárselos a buenos precios son muy competitivas en comparación con el vendedor particular. También estos precios bajos hace que el valor de tasación de los inmuebles en general en una determinada zona se vea fuertemente resentido, ya que el valor de tasación se basa sobre todo en la oferta y la demanda, es decir, el valor por el que el mercado está dispuesto a quedarse un inmueble, por tanto, el inmueble más ventajoso será el que con las mismas características esté al mejor precio, esto hace que los inmuebles ofrecidos por particulares normalmente se tarde más en venderlos a no ser que puedan ajustar al máximo su precio y su valor de tasación caiga en algunos en picado.